Sigo en píe.

Sigo el horizonte, sigo en la utopía
voy conociendo nuevos caminos
pero en dirección a mi norte
tomo algunos atajos para no caer en la rutina
tropiezo con la misma piedra de vez en vez
me caigo y me levanto con una lágrima
que luego el sol seca con sus rayos
y aunque estoy hecha de melancolía
también sé sonreír a diario...

Reflexión.

Somos dueños de nuestra alma y de nuestro cuerpo
dueños de nuestras palabras y nuestros silencios.
Que peor cadena que la que uno mismo se coloca
para reprimir los deseos y los sueños...
La libertad no es cuestión de pedirla, es cuestión,
de aceptarse a sí mismo, y otorgársela.

La sociedad condiciona nuestra mente
haciéndonos creer muchas veces que vamos por el camino equivocado
lo que muchos no reconocen es que somos seres individuales
y que cada uno tiene derecho de tomar el camino o atajo que guíe la luz de sus ojos.

Los errores nos dejan experiencias, que nos hacen ser más humano.
Cada tropiezo y cada caída forja nuestra voluntad y nuestro carácter,
así que cada día hay que estar dispuesto a ser la mejor imagen de uno mismo.
Busquemos nuestro horizonte, que aunque éste sea utopía vale la pena seguirlo.

Para ser perfecto tendrías que dejar de ser humano
entonces no te esfuerces en vano, la vida no va a esperar por ti para seguir su ritmo.
Comienza ya tu historia, no dejes página en blanco, ni principio sin desenlace.

Abre tus percepciones
deja a un lado los prejuicios
aceptemos que tú y yo somos diferentes
y alcemos el vuelo.

Soy Rosa.

Saldré esta noche, dejaré las espinas en casa
me entregaré a la vida o tal vez a un hombre
todo depende de quién se aparezca primero.
Abriré mis pétalos y esparciré mi esencia.
No me daré en oferta, pues no tengo precio
pero si tengo pasión que entregar.
Disfrutame hoy porque tal vez mañana esté marchita.

Disfruta cada sorbo.

Lo doy por hecho
los mejores momentos de la vida
vienen en sobres instantáneos
se hacen sin tanto pensar y se disfruta al instante.
A veces somos tan impacientes
que lo tomamos de un solo golpe
pero la magia está en disfrutar cada sorbo
en dejarte sentir como recorre tu paladar
y todo tu cuerpo para luego hacer digestión
para luego decir adiós
pero sin culpas ni remordimientos.

Vivo de estrellas.

Por las noches los recuerdos se vuelven estrellas

que titilan de tal forma que no puedes evitar que están ahí,

te recuestas en tu soledad y observas como va de paso tu vida

y comienzas a darle formas a tus recuerdos, como quien dice 

ver a los tres reyes magos o los signos zodiacales.

Mis estrellas forman signos, que descifran mi presente y comprometen mi futuro,

hay unas que brillan con más intensidad, todo depende de quien la haya dejado allí. 

Redundancia.

Tratando de comprender los misterios 

que envuelven mi alma, las penas 

que arrastro, que he heredado 

los recuerdos que queman

en plena hoguera... y esas otras 

cosas que no recuerdo pero 

que me encadenan, y así como 

el hierro no se moldea como plastilina

así mi mente y este dolor en el pecho

resulta inamovible...

Busco comprender tantas cosas 

pero la vida es un laberinto 

y entonces cuando creo llegar al otro extremo 

me doy cuenta que he llegado al centro de nuevo

por que las preguntas se reiteran 

se re formulan con algunos sinónimos 

para no redundar, aunque sabemos 

que lo estamos haciendo...

Empiezo a creer que si, la vida 

se crea de redundancias, una vez que 

cometes el error, lo vuelves reiterativo 

por lo que resta de vida. 

Yo no creo en casualidades.

Nada pasa por casualidad

la vida y cada momento

lleva un sentido, explicito o oculto

todo es la causa de...? 

y es allí dónde empiezan a revolotear las dudas 

comienzo a implorar por las respuestas

quiero comprender la situación 

pero es cuestión de tiempo

sé que a esto se le llaman experiencias

sé que más adelante, sí la vida me alcanza

obtendré las respuestas que hoy añoro... 

Por ahora sólo debo ocuparme en vivir

a estas horas, sólo sé que algo vale

y eso es ser "feliz" con lo que llego

con lo que se fue y no aviso

con las sonrisas que fotografié en mi mente 

con la piel erizada que me deja tu recuerdo

con los besos que quedaron marcados en mis labios...

Andaré con mis cicatrices, pero así como me las hice

así mismo yo me hago responsable de sanarlas. 

Seamos atajo o camino...

Yo no pretendo clavarte ningún puñal
al contrario, sí me dejas podría intentar
curar las heridas...
Tampoco pretendo ser indispensable,
sólo quisiera brindar lo mejor de mí,
sólo pretendo días o noches cálidas,
en las que la pasión, mas que derroche,
se convierta en poemas que se ilustran
en nuestra piel...
Sólo quisiera dejar huellas que te hagan
valorar tu existencia... que cada momento
sea una inversión en nuestras vidas.
Este camino, o atajo, como queramos llamarlo,
termine siendo de reconfoert para nuestras almas,
y con cada mirada, cada sonrisa, evadir los
tiempos de tempestad.
Seamos seres humanos que cometen errores y saben enfrentarlos.